martes, 17 de junio de 2008

Todos los hombres de la guerra. Héctor D’Alessandro

Todos los hombres de la guerra. Héctor D’Alessandro

Recorre el suntuoso palacio arriba y abajo Héctor, caro a Zeus, en busca de Alejandro. ¿Qué estará haciendo en esta hora trágica este desgraciado?

Al fin lo encuentra, Alejandro está acicalando sus armas y sus escudos y su loriga. Helena está entregada a labores cosméticas en compañía de sus esclavas.

¡Desgraciado! le dice y agrega que no es justo que otros mueran por él mientras está aquí sin ir al frente.

Alejandro se justifica y manifiesta su deseo de volver al combate rápidamente. ¡Mira que casualidad, justo es lo que ahora mismo estaba pensando!

Aclara, sin embargo, no estaba aquí por encontrarse airado o resentido con los troyanos.

No, más lo está porque deseaba entregarse el dolor.

Sí, el guerrero troyano tiene en su protocolo de tal un momento para entregarlo y entregarse en brazos del dolor. La guerra como terapéutica.


: , , , ,



No hay comentarios:

Comparte, citando la fuente, todo aquello que te guste, recomienda estos contenidos, comunícate

Todos los derechos están protegidos mediante Safe Creative.

Excelencia creativa en Coaching para Escribir.

o al
2281 78 07 00 (de México)